Cuando hablamos del futuro de nuestros hogares, todos nos imaginamos intrínsecos mecanismos que automaticen todos los elementos posibles del hogar, a cambio de un enorme desembolso de dinero. Planchas que planchan solas, persianas que se cierran o abren mediante palmadas… al fin y al cabo comodidades, no necesidades.
Pero esto es una idealización que no se aproxima a la realidad todo lo que debiera. Prueba de ello son las nuevas bombillas inteligentes, en las que cada vez confían más empresas. Así, LG, Samsung y Philips han decidido apuntarse al carro de la luz del futuro, compitiendo entre ellas (lo cual nos extraña mucho a todos, y perdón por la ironía), para hacerse con el control de este suculento mercado.
Pero, ¿en qué consisten estas bombillas? El concepto es claro: la regulación de luz. La cosa comenzó por esas luces de rosca que permitían más o menos intensidad, pero con las nuevas bombillas inteligentes, la cosa evoluciona a cotas nuevas. El control de la intensidad se hará esta vez mediante un terminal Smartphone, permitiendo un control más exacto y muy intuitivo.
Además, estas bombillas incluirán numerosas ventajas respecto a las convencionales, como desconexión a distancia, lo que nos puede ahorrar volver de nuestras vacaciones a comprobarlo. También existirá una libertad de las empresas a la hora de implementar características de ambientación como muchos colores diferentes a elegir en la misma bombilla.
Por otro lado, también dan la posibilidad de incorporar distintos efectos de luz (detalles poco importantes pero bastante divertidos). Respecto al precio… bueno, la conclusión es que sin lugar a dudas vamos a ahorrar, ya que gastaremos hasta un 80% menos de consumo. Eso sí, a la larga, porque deberemos realizar una inversión inicial algo elevada para tratarse de una bombilla (hasta veinte euros pueden llegar a costar estas curiosas luces). Sin duda, la naturaleza te lo agradecerá.