Desde la década de los 90 el término marketing online ha aumentado dentro del sector empresarial como un instrumento que puede impulsar el alcance y refinar los perfiles de las organizaciones.
Contextualizando un poco, se entiende el marketing online como el desarrollo de contenidos y puentes de comunicación de una determinada empresa bajo un marco tecnológico; hoy en día tener una página web corporativa no es suficiente, hay que establecer el proceso digital para poder explotar los beneficios de este tipo de mercadotecnia.
Beneficios del marketing online
Siempre basándose en el marketing tradicional, su versión digital permite conocer los intereses de los target a través del uso de las cookies, que son la fuente de información de las páginas visitadas por los usuarios. Por medio de estas acciones las empresas pueden definir mejor su mercado, establecer necesidades y producir publicidades que, en consecuencia, sean más eficaces porque estarían basadas en los intereses de su público.
Además de representar una reducción de inversión económica, se puede aumentar el alcance de los mensajes emitidos por la empresas; identificar mejor los nichos del mercado por medio de la centralización de las emisiones y, asimismo, crea puentes comunicacionales entre la empresa y los usuarios, facilitando el reclutamiento de influencers (personas conocidas dentro del medio digital que pueden promover alguna marca o producto) y generar embajadores, que son aquellas personas que desarrollan una fidelidad porque integran al producto en su vida, más allá de la relación de beneficios por la publicidad, como puede ser el caso de los influencers.
Si bien nunca podrá reemplazar el marketing tradicional, el online es mucho más interactivo, lo que permite medir, casi a tiempo real, las reacciones de los usuarios a los mensajes emitidos y actuar en consecuencia. Al reducir la distancia entre actores, son los usuarios los que llegan a las marcas de manera online, bien sea por recomendaciones o sugerencias, de igual forma, es mucho más flexible: toda la estrategia y el objetivo de una empresa puede resumirse en una imagen, un GIF o un vídeo que se vuelve viral por las redes sociales.
Por lo tanto establecerlo como una herramienta empresarial implica no solo incrementar la visibilidad de la organización sino crear lazos con un público que cada vez consume más por sus laptops y smartphones. El mundo y las tecnologías avanzan, y las estrategias de mercadeo deben adaptarse, evolucionar y sobrevivir a través del marketing online.