Mini préstamos, créditos rápidos, préstamos P2P… La financiación online está en auge y cada vez son más los españoles que optan por entrar en Internet en busca de dinero. Además de la ventaja obvia que es poder pedir un préstamo desde el sofá de tu casa, los préstamos online son mucho más rápidos que los bancarios (los mini créditos te ofrecen dinero en tu cuenta en tan solo 15 minutos) y, sobre todo, más fáciles de conseguir.
Esta facilidad de concesión ha sido quizás una de las claves del crecimiento del sector, sobre todo el de los mini créditos online, que hasta hace poco eran unos auténticos desconocidos en España. La negativa de los bancos a conceder créditos durate la crisis, por otro lado, no ha hecho más que impulsar el sector y hacer que cada vez haya más empresas de créditos online.
Sin embargo, son muchas las voces que se alzan en contra de este nuevo sistema de financiación, sobre todo por lo elevado de sus precios.
Los bancos dan más créditos pero más caros
Ante la alta competencia del sector online, los bancos han optado por volver a abrir el grifo del crédito y en julio del 2015 nos despertamos con la noticia de que los créditos al consumo concedidos a los hogares habían aumentado en un 10%, alcanzando cifras que no se veían desde hace 5 año. Sin embargo, esta subida, que se ha producido por tercer mes consecutivo, se ha unido a una subida de la TAE. Mientras tanto algunos prestamistas privados de créditos online, que tradicionalmente eran mucho más caros que los préstamos tradicionales, han empezado a bajar cada vez más sus intereses hasta igualarlos e incluso mejorar los de la banca.
Si la banca no mejora las condiciones de sus créditos y no agiliza sus trámites, parece inevitable que siga pasando lo que está pasando hasta ahora: cada vez habrá más empresas de préstamos online y más ciudadanos que se olviden del banco para conseguir financiación.
Cuidado con el dinero fácil y rápido
Entrar en una web, introducir los datos, enviar algunos documentos y tener tu préstamo ese mismo día…lo que hace unos años parecía imposible ahora está en nuestro día a día gracias a Internet. Sin embargo, la facilidad y agilidad de concesión pueden ser una trampa fácil para todos aquellos que tienen problemas con las deudas, y son muchos los que entran en espirales de impago y acaban encadenando créditos. Antes de solicitar cualquier tipo de préstamo, tanto los online como los bancarios, es esencial planificar los pagos (lo más recomendable es acercar al máximo el día de pago con el día de cobro de nuestra nómina) y solicitar cantidades realistas adecuadas a nuestros niveles de ingresos.
En caso de impago, la mayoría de empresas de créditos online empiezan aplicando penalizaciones económicas. Si el cliente sigue sin pagar, será incluido en ASNEF y, finalmente, llevado a juicio.