Windows 9 seguirá la estela de Windows 8

Windows 9 es una realidad, pero es una realidad de la que se sabe muy poco a ciencia cierta. Los datos no paran de filtrarse, más en forma de rumores y conjeturas que de información verídica. Pero conforme pasa este 2014, las piezas del puzle van siendo cada vez más claras. Veamos que se cuece en la prensa del corazón tecnológico.

Parece ser que las tonalidades azules claras predominarán en Windows 9, y hará contraste con la oscuridad de Windows 8. Por cierto, suena con fuerza que Microsoft haga hincapié en su nuevo escritorio tipo tableta, muy pensado para los ordenadores portátiles táctiles. ¿Qué quiere decir esto? Pues que Microsoft se pasa por el arco del triunfo la opinión de sus usuarios.

No se entiende otra explicación, si nos atenemos a que la gran mayoría (la grandísima mayoría de hecho) ve prescindible, molesto e innecesario el nuevo escritorio de Windows. Una minoría lo ve interesante, y a otra le resulta indiferente. Pero la verdad es la que es: el nuevo punto de vista no es muy bien acogido.

Y suele pasar en muchas ocasiones que una compañía juega en contra de la opinión de sus usuarios porque cree que, mejorando notablemente esa cualidad que tanto disgusta, puede hacerlos cambiar de opinión y acabar por no desear otra cosa. Pero la realidad es otra, y le pese a quien le pese, para el poseedor de un ordenador no táctil el nuevo escritorio se antoja pesado.

Y es que da igual lo que la empresa de Gates haga, o los errores que cometa, al final todo el mundo acaba acatando los cambios que implementan sus nuevos sistemas operativos. Aquí va una idea para Microsoft: la opción de elegir tener ese escritorio o no. ¿Por qué no lo hacen? Porque saben que acabaría desapareciendo.